jueves, 23 de diciembre de 2010

La navidad

El comercial ambiente,
ahora se vuelve inerte.
Porque esto no es navidad,
ya no hay la verdadera felicidad.
Ya no se cantan villancicos,
solo suenan toca-discos,
del grandioso Corte Inglés,
donde se viste el marqués.

Yo que no tengo dinero,
que no robare un cajero,
que todos mis caros deseos
son tenerte entre mis dedos.
Que el ultimo suspiro del año sea tuyo
y tu primer beso del año sea mio.

L.Linkon